La Jaula Transparente…
Vemos animales que se mueven en una dimensión más amplia que su estructura, excediendo los márgenes de representación que nuestro imaginario mental de inocencia ha codificado. Son seres naturales que a primera vista se reconocen pero carecen de completud no sólo en su anatomía, sino en su integridad esencial de seres vivos que han sido desplazados a una función diferente por el artista, para examinar a través de su propuesta plástica propósitos simultáneos, uno el que rescata el mundo de la ilusión casi siempre propio de la infancia y el otro, la pérdida de las fantasías primeras por vernos avocados indefectiblemente a un problema actual sobre la manipulación, la crueldad y la domesticación de las especies por otra forma de “conciencia” humana en virtud de la evolución y la tecnología.
A pesar de que ésta obra plantea la denuncia de la hostilidad del hombre hacia el reino animal, Alejandra Sepúlveda no omite una poética visual. Así, en “CONTRANATURA” nos trae historias que sin tener vida real recrean una nueva en cada quien; y es porque los cuentos también encuentran en el papel la forma de contarlos, no se advierte su grafía literaria o visual para mostrarse próximos a la razón. Esta artista nos habla de sus fábulas y metáforas que convierten la línea grasa y oscura del dibujo en una propuesta de narración artística sobre el papel plegado que se vuelve espacio y se renombra en la jaula transparente, es un edén encapsulado donde el no – sapiens habita en la evocación de infante de Alejandra, trasegando por los caminos selváticos, follajes tupidos, animales salvajes, silvestres, su animal doméstico; algún otro referente fotográfico, los cuentos animados, los álbumes de cromos, los programas sobre naturaleza y los calendarios con escenas forestales que nos cuentan del tiempo y otros mundos.
En esta obra de dibujo podemos advertir que el arte puede ser redimido de su poca apreciación como objeto útil, la verdad es que el gesto plástico bajo cualquier formalización, comunica la necesidad del artista para la reflexión de los demás que se proyectan en esa necesidad, y expresar la belleza en algo cercano y lejano a nosotros.
Liliana María Hernández Obando
Directora
Plecto Galería de Arte